Noticia 23-11-2021 8:40 AM
A la hora de invertir el primer consejo que se ha de recibir es aquel que dice: “Invierte el capital ahorrado que no vayas a necesitar ni para tu vida diaria, ni para imprevistos”.
Sin embargo en estas circunstancias en las que vivimos es difícil ahorrar lo suficiente como para no necesitar ese dinero, además de tener un “colchón” para imprevistos. Y lo que nos sobra, a veces es una cantidad que no puede alcanzar la cifra mínima de lo que se supone que puede ser una inversión.
Pero últimamente, junto con las criptomonedas han aparecido “cosas” como el Shiba Inu que hace que cualquier persona con 200 euros sea “millonaria” en esa moneda ya que su cotización es de 0,00008841€, y por lo tanto tendría más de dos millones de esa “moneda”.
“Nadie quiere comprar 0,01 bitcoins, pero sí tener millones de Shiba”.
La falta de información y formación financiera hace que se estime el valor de una empresa o cotización en barata o cara en función del precio de la cotización. El error está en no hacer la comparativa con la cantidad circulante que hay en el mercado de esa cotización.
El concepto erróneo caro/barato respecto a una cotización se ve cuando un inversor tiene 100 acciones de la empresa X que cotiza a 2,00€ y dicha empresa realiza un “Split 2×1”, o sea multiplica sus acciones por dos y divide su precio por dos. Una vez hecho esto el valor de la empresa es el mismo.
El valor de la cotización se ha dividido por dos, antes era de 2,00€ y ahora es 1,00€, pero el inversor en lugar de tener 100 acciones ahora tiene 200. El valor de esa inversión antes y después del Split es el mismo.
Pero erróneamente para el futuro inversor la sensación es que a un euro la acción, está más barata que cuando estaba a dos euros, cuando ya hemos visto que no es así.
El porcentaje
En la exposición anterior hemos visto porque es atractivo para alguien “invertir” 200 € en una cotización que vale una “cienmilésima” parte de euro. Ahora vamos a ver el concepto porcentaje.
Este tipo de inversiones se han hecho famosas por momentos puntuales en el que el precio se ha disparado, y unos pocos han ganado un 100 o un 200 por ciento. Pero eso no ocurre a diario, es más ante esa subida vertical del precio, no todo el mundo compró abajo del todo, se fueron incorporando conforme iba subiendo. Eso también quiere decir que hubo personas que compraron en su precio más alto, y por lo tanto cuando empezaron las caídas se quedaron “pillados”.
Nadie puede pensar que con una inversión de 200 euros te puedes hacer millonario, ni puedes vivir de ella, ni siquiera puedes pagarte unas vacaciones.
Claro está que si eres un “trader” profesional y consigues ganar 200 euros al día, si que puedes aspirar a vivir de ello.
Lo que pasa es que aquél que un día invirtió 200 euros y hoy tiene 400, puede ser que mañana tenga 100. Y perder 100 euros “no tiene tanta importancia”
Pero veamos el concepto de porcentaje, si tiene 200€ y los convierte en 400€ ha ganado el 100%. Si tiene 200€ y pierde 100€, ha perdido el 50%. Pero si tenía 200€ pierde el 50% por lo tanto le quedan 100€, ¿Qué porcentaje tiene que ganar para por lo menos quedarse en los 200€ que tenía?. Pues la cotización tiene que subir el 100% y después de una bajada que le supuso una pérdida del 50%, eso no se hace en dos días.
Por lo tanto tenemos que tener en cuenta a la hora de invertir tanto en el objetivo de la inversión como en los porcentajes de retorno, mucho más que si la cotización está a 1€ o a 0,00008841€
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